ARRIVERSOS cierra su decimotercera
edición convirtiendo Guadalajara en “Vandalajara”
· La Biblioteca Pública se llenó de “vándalos”
llegados de Madrid para la presentación de la revista de creación Mester de Vandalía
· En el encuentro de grupos poéticos con
el que se cerró el festival participaron también miembros del Taller de Poesía Fernando
Borlán y de la tertulia Diversos
01-mayo-2016.-
“Los
vándalos somos gente sencilla a la que nos gusta reunirnos, disfrutar, leer
poesía e ir tomando ciudades. No tenemos muchas pretensiones: sólo queremos
cambiar el mundo”. Así de clara y rotunda
es la definición de “vandalía" que dio el pasado sábado en ARRIVERSOS la
escritora y editora Malagueña María Jesús fuentes, para explicar a los
presentes lo que significa esa palabra con la que suele referirse a las autoras
y autores de toda España que se van sumando a la revista de creación poética Mester de Vandalía que ella dirige.
Ser “vándala” o “vándalo” –las
primeras poetas que se sumaron al movimiento eran mujeres y por eso es más
común que el adjetivo se use en femenino– no es sólo haber enviado algún poema
inédito o no para que aparezca en la revista, sino tener una forma creativa de
entender el mundo y sumarse a las actividades culturales que a partir de la
revista se han ido haciendo en diferentes puntos de España.
La editora andaluza presentó su
revista acompañada de los poetas guadalajareños Jesús Aparicio y José Luis
Gómez Recio, en representación del Taller de Poesía “Fernando Borlán” de la
Biblioteca Pública de Guadalajara y de la tertulia semanal –y revista de creación
poética asociada a ella– Diversos. Entre los tres, con la participación de
Gracia Iglesias en el papel de introductora y “des-moderadora” se produjo un
entretenido coloquio sobre grupos poéticos y revistas literarias, al que
también se invitó a participar a los asistentes congregados en el salón de
actos del Palacio de Dávalos, entre los cuales abundaban los poetas miembros de
los tres colectivos representados en la mesa.
“Un
grano de poesía para perfumar un milenio”
Si, como dijo el poeta José Martí, “un
grano de poesía es suficiente para perfumar un siglo”, cuando la poesía va
acompañada de un “espíritu vándalo” el perfume se extiende hasta un milenio. Tal
es la convicción de María Jesús Fuentes, quien, derrochando simpatía y calidez,
fue compartiendo el turno de palabra con unos y otros e interesándose por el
trabajo poético que hacen los distintos grupos de Guadalajara.
Jesús Aparicio explicó cómo hace ya diez años emprendió la tarea de iniciar
lo que por entonces era un pequeño taller poético en la Biblioteca de
Guadalajara, para responder a una petición que le venía llegando desde hace
tiempo por parte de algunas amigas y amigos interesados en escribir poesía. “Lo hice con la esperanza de que al poco
tiempo se cansaran de mí”, comentó con humor el autor de poemarios como “La
paciencia de Sísifo” o “La papelera de Pessoa”. Pero nadie se cansó, y una
década después el Taller de Poesía “Fernando Borlán” sigue en activo y más vivo
que nunca, reuniéndose dos sábados al mes por la mañana para leer y estudiar a
los clásicos y también hacer ejercicios de composición poética, de los que se
encarga Pepe Calleja –también presente en el encuentro de Arriversos–.
Al mencionar el nombre de
Fernando Borlán, “verdadero poeta y
maestro”, a quien rinde recuerdo el nombre del Taller de Poesía
guadalajareño, Gracia Iglesias señaló que también a él se debe la existencia del
festival de poesía ARRIVERSOS, heredero del Mapa de Poesías fundado por el querido
profesor. Una cerrada ovación sirvió de firma al pequeño homenaje. Hubo también
recuerdo para otros ausentes, como el artista Fernando Romero, encargado del
diseño artístico de la revista Mester de
Vandalía.
Frente a los dos lustros de
andadura del Taller de Poesía, Gómez Recio puso sobre la mesa intenso trabajo
realizado por la tertulia Diversos en tres años de tertulias, recitales y publicaciones.
Recitales en Guadalajara, Torija y Cogolludo entre otros lugares, homenajes a
autores de generaciones precedentes, actos de conmemoración cervantina, exposiciones
y hasta 113 fanzines semanales publicados y recogidos en volúmenes bimestrales desde
que, hace dos años, los miembros de la tertulia decidieran que no querían que
sus palabras se las llevase el viento.
Versos como broche final
Entre risas y reflexiones que fueron
creando un agradable ambiente de cordialidad, se dio paso a los versos, como no
podía ser de otra manera en un acto en el que la poesía es protagonista. Por
turnos, invitados por Fuentes que daba alternativamente la voz a los poetas de
Guadalajara y a los venidos desde Madrid, fueron saliendo a la palestra para
recitar sus versos –introducidos por breves “notas
a pie de página” de iglesias que apuntaba anécdotas y rasgos de la
biografía de los intervinientes–, Carmen Jodra, quien además de un poema propio
leyó otro del ausente Jesús Munárriz, Diego Román, Javier Delgado que puso
asimismo voz a los versos de Paulino Aparicio, Pepa Nieto, Jesús del Real que recitó
una composición propia y otra de José Cereijo, Jorge Mato, Alex Sánchez, Pablo
Llorente, Luis Pérez y Vicente Orallo. También hicieron sendos aportes
poéticos, breves pero muy bien construidos los propios José Luis Gómez Recio y
Jesús Aparicio.
Tan cómodos se sentían los presentes, tanto mesa como público, que la
tertulia se prolongó hasta que llegó el momento de cerrar la Biblioteca. Casi
dos horas de encuentro cordial que se completaron con fotos e intercambio de
revistas y libros. “Continuamos fuera,
que tienen que cerrar”, apremiaba Iglesias a los poetas, que prometían volver
a reunirse para volver a hacer de Guadalajara una “Vandalajara” en toda regla.
Con este acto ARRIVERSOS 2016 bajaba la persiana hasta el año que viene,
poniendo un alegre broche final a una edición en la que ha obtenido un récord
de espectadores y participantes, obteniendo críticas muy positivas a los actos
realizados.
La Asociación Cultural Grupo el Observatorio empieza ahora ya a trabajar en
la organización de la próxima edición de este festival, íntegramente
patrocinado por el Patronato de Cultura de Guadalajara que, tras más de una
década llenando Guadalajara de poesía, se ha convertido ya en uno de los
emblemas culturales de la capital alcarreña.